Y el gilipollas habló

La rata miserable que habita en La Moncloa, conocida por el nombre de ZP acaba de hacer, una vez más, alarde de su estupidez mental y ha dado muestras de su naturaleza traidora heredada posiblemente de algún ancestro traidor.

En su comparecencia en el Congreso, ha echado en cara a Rajoy la actuación de Aznar en el "caso Perejil", aquel intento de invasión de la morisma que muy acertadamente evitó Aznar, calificándo aquella acción como "la gran hazaña de Perejil".
Rajoy le ha respondido en los siguientes términos, "¿Qué quiere decir con lo que ha dicho sobre el asunto de Perejil? ¿Qué pasa si alguien invade territorio español? Me gustaría saber cuál es la posición que mantendría en ese caso el presidente de España".

El miserable ZP, como acostumbra, no ha respondido, se ha limitado a decir que aquello fue el "fruto de una mala política exterior" (por el gobierno de Aznar) y dijo que "rayó lo surrealista en unas relaciones de vecindad con Marruecos".

O sea, que como tenemos una "buena vecindad" no pasa nada porque nos invadan los moros ¿no? ¿se puede ser más traidor y más gilipollas? sí, se puede y seguro que ZP no nos defraudará, él nunca lo hace.

Imagino que si este argumento lo trasladamos en el ámbito doméstico a ZP le parecerá surrealista que un hombre sacuda a su esposa ¡más tratándose no sólo de un caso de vecindad, además sentimental!

Asco de tío...